Dentro de mi tengo un lugar reservado, al cual le llamo «mi pequeña parcela de la ignorancia»
Todos los días le dedico un ratito de mi tiempo. Cuido de ella quitando las malas hierbas de la soberbia, procurando que haya espacio para la curiosidad.
Sólo cuando este pequeño terreno está diáfano, es posible sembrar; pero no cualquier cosa, pues tengo comprobado que los pepinos (política, futbol, Belén Esteban..). que tan bien le sienta a mi vecino, a mi se me indigestan, y me es más nutritivos los tomates ( Gestalt, lectura, espiritualidad…)
Para mi se ha convertido en una tarea diaria el procurar que no le falte la luz de mi atención, el agua de mi dedicación y el abono de mi experiencia.
Y es que hoy; me he dado cuenta de que mi parcela va creciendo por día, y esto me dice cuán basta es mi ignorancia y cuánto puedo sembrar en ella.
Thanks for your blog, nice to read. Do not stop.
Me alegro que te guste, gracias.